lunes, junio 12, 2006

Cómo limpiar zapatos, en 13 pasos.

  1. Los zapatos se limpian.
  2. Materiales: una bayeta húmeda, una seca, un cepillo para sacar brillo, un cepillo para echar crema (también vale una servilleta de papel, un disco desmaquillador que se dejó olvidado tu chica, etc)
  3. y crema del mismo color que los zapatos. Es decir, negra si son negros, marrón si son marrones.... Si el color es raro y arriesgado, la hay incolora.
  4. Se pasa la bayeta húmeda para quitar el barro, si es el caso.
  5. Si se ha hecho el punto 4 por ser muy necesario, hay que dejar secar los zapatos antes de seguir.
  6. Se coge el cepillo y se pasa por los zapatos para quitar el polvo.
  7. Se coge el trozo de lo que sea, se le pone crema, no mucha, y se estira por todo el zapato. No te mates por los talones, lo tapa el pantalón y nadie se fija. Y así no manchas tanto los bajos....
  8. Deja que seque la crema. Seguro que la histérica de tu ex no lo hacía pero te aseguro que una cervecita y un intermedio te ahorrarán muchos sudores.
  9. Cepilla los zapatos como si estuvieras pasándoselo a la querida madre de tu ex.
  10. Si quieres que brillen, gamuza seca para sacar brillo.
  11. Recomedación 1: limpia a la vez todos los zapatos de un mismo color que tengas. En serie es más rápido.
  12. Recomendación 2: con crema líquida y autobrillante te puedes saltar del 7 al 11.
  13. Si no los haces brillar mucho la primera vez, otra pasada de cepillo y te ahorras volver a limpiar.... ¡una de cada dos veces!

jueves, junio 01, 2006

Trece regalos

A ver, puntualicemos, generalizo y eso ya sabéis lo que es. Son cositas que les molan y cositas que odian y alguna, pues ambigüa, sin más.

  1. Un coche: un acierto seguro.Ya sé, así cualquiera.
  2. Un viaje: a Roma, a una playa desierta en Almería, a un refugio en Panticosa. Que suene romántico, vaya.
  3. Flores: para demostrar que la noche anterior fue inolvidable, que no eres un cutre puesto que te gastas la pasta en algo muy perecedero, que ella es un ser delicado, etc. Ya sé, chorradas, pero yo estoy aquí para aclararte, ¿no?. Nunca plantas, esas las reservas para mamá.
  4. Bombones: en caja bonita, artesanos si es posible. Tienen la ventaja de que te comerás la mitad. Cuidado en verano: nada peor que el chocolate derretido, sería un fiasco.
  5. Joyas, y especialmente sortijas. casi todas se pirran por enseñarle a sus amigas la sortija que le regaron en, por ejemplo, la tercera "cita". Incomprensible. Creo que tiene mucho de signo externo.
  6. Perfumes: aunque use siempre agua de colonia, regálale siempre un perfume un poco más sofisticado, sexy.
  7. Lencería: para esto ya hace falta algo más de complicidad. Cuidado con regalarla demasiado pronto. Como se lo tome como una indirecta....buffffff. Ya ves, peligroso pero muy rentable para ti, si aciertas.
  8. Zapatos: sólo sin son, por ejemplo, de tacón y rojos. Quiero decir, con un cierto fetichismo detrás. Nada de alpargatas o zapatillas de deporte.
  9. Música: con estilo. Por ejemplo, un recopilatorio de blues o de bossa nova, o una selección de vuestra música favorita hecha por ti.
  10. Electrodomésticos: están prohibidos absolutamente y en cualquier modalidad, especialmente contraindicados si vivís juntos. No hay convivencia que resista eso.
  11. Bolsos: pero si nosotros no entendemos de bolsos, porqué los regalamos. Olvídalo, no acertarás jamás o te saldrá carísimo (siempre me han parecido las cosas con peor relación calidad/precio)
  12. Ropa: sólo si estás seguro de la talla, te conoces bien su vestuario y sabes que no repitas, tienes tickect de regalo, dan vales sin fecha de caducidad, etc Inevitablemente lo cambiará. Este es un regalo si no queda otra.
  13. Libros: para muy pocas. Nunca de cocina o jardinería (podría creer que le quieres enseñar algo de eso), nunca si no hay relación física entre vosotros (podría creer que no la miras), nunca si no lee (puede creer que es una indirecta). Podría servir algo de poesía, con mesura.

Siempre parecen dispuestas a recibir un regalo. No las decepciones, ni haciéndoselo, ni equivocándote en la elección.